viernes, 3 de septiembre de 2010

Que hare de mi vida


Resignación dice no puedo
Aceptación dice Dios todo lo puede

Resignación es entregarse al destino u la suerte.
Aceptación es entregar nuestras vicisitudes a Dios.

Resignación dice estoy solo
Aceptación dice yo pertenezco a Dios y el dirige mi vida.

Resignación paraliza el proceso de la vida
Aceptación libera el proceso de vida para lograr mayores objetivos.

Resignación dice ya todo término para mí.
Aceptación pregunta ahora que estoy aquí, cual es el próximo objetivo.

Resignación paraliza el proceso de la vida
Aceptación liberta el proceso de vida para lograr mayores objetivos.

Resignación dice ya todo término para mí.
Aceptación pregunta ahora que estoy aquí, cual es el próximo objetivo.

Resignación descansa calladamente en un mundo silencioso,
Aceptación se levanta para reencontrase con Dios que llena plenamente ese vacío con un propósito y designio.